El Sindicato de Capataces Estibadores Portuarios y Personal Jerárquico de la República Argentina (SCEPPJ) liderado por Osvaldo Giancaspro, llevó adelante el Primer Plenario de Delegados 2023 que evaluó y debatió acerca de las distintas problemáticas que alcanza a los jerárquicos portuarios. Del encuentro participaron los miembros de Comisión Directiva, la letrada del gremio, y los referentes de las distintas Terminales del Puerto de Buenos Aires, TRP, Dock Sud, BACTSSA, Depósitos Fiscales, EXOLGAN, y de los puertos del interior: San Nicolás, Campana, Zárate, Concepción e Ibicuy, Entre Ríos.
El cónclave de los Jerárquicos portuarios que tuvo lugar el pasado 14 de marzo en la sede gremial del barrio porteño de La Boca, abordo distintas temáticas como, el análisis de la paritaria salarial de los Puertos Privados, el Puerto de Buenos Aires y los puertos del interior, y frente a estas la posición que tendrá el SCEPPJ. Otro de los puntos destacados fue, el haber conquistado la aplicación de la escala salarial del gremio en la empresa LOGINTER que se consiguió después de muchos años de reclamo para que los capataces cobraran como tales y no con el convenio metalúrgico.
La conquista en LOGINTER se alcanzó a partir de la lucha del gremio junto a los Capataces del Puerto de Campana, de Dock Sud y Puerto Nuevo y sus cuerpos de delegados, que permitió avanzar en el acuerdo de un correcto encuadramiento y en la recomposición del premio de productividad que se
aumento en un 100%.
Otro tema fue, la concreción de un convenio de capacitación con el aporte de las empresas en el puerto Zárate Campana que está a la firma, y en vista plantearlo en el Puerto de Buenos Aires. Convenio que no solo lleva a una capacitación de los capataces portuarios sino además a una mejora en su categoría que se traslada a su vez a una mejora salarial. La propuesta del Sindicato de Capataces de esta modalidad de capacitación fue bien recibida por las empresas y solo resta definir las temáticas para ponerla en marcha, sobre las cuales el gremio propuso un listado que tienen que ver más que nada con liderazgo del grupo de trabajo, manejo de tareas, y el conocimiento sobre el estado del mantenimiento de los equipos operativos.
También remarcaron, la necesidad indispensable de que el cuerpo de delegados desde cada ámbito de trabajo continúen con los planteos de la problemática de cada lugar a la secretaría gremial, para que esta lo trate con la Comisión Directiva de modo de poder trabajar los temas y encaminar los planteos a una mejora o solución de los mismos. Una política gremial que se ha respetado y potenciado desde el inicio de la gestión de la actual conducción que a más de un año de asumir se plasma en distintas conquistas, como es el caso del Puerto de San Nicolas donde los capataces pasaron de ser eventuales a personal permanente de la empresa, además de conseguir que se les empiece a pagar el concepto por antigüedad.
Por supuesto un tema central fue el de la prórroga de las licitaciones de las Terminales del Puerto de Buenos aires que entra en la recta final. En este sentido, recordaron la reunión que el Sindicato de Capataces mantuvo con el ministro de Transporte en la que plantearon la situación y le anticiparon al funcionario que desde el gremio elevarán una propuesta de condiciones laborales para los capataces para el puerto que se viene en la ciudad de Buenos Aires, para luego hacerlo lo propio a nivel nacional.
Y finalmente, un tema que analizaron fue la lectura e interpretación de cómo están confeccionados los recibos de pago que en algunos casos resultan indescifrables, en lo que respecta a la determinación del valor hora dentro de distintos conceptos «no remunerativos» que requiere de la explicación de recursos humanos, a quienes tampoco les resulta nada fácil darla.
Para el caso, el tema apunta también a la liquidación del concepto de productividad, cuestión que en una u otra terminal cómo es que la pagan es otra de las problemáticas a resolver abordada en el plenario. Situación que según consideraron se presenta por la falta de un dato que posibilita realizar el control correspondiente en el recibo de haberes, derecho que evitaría que el trabajador capataz termine cobrando lo que «se le canta» a la empresa. Al respecto indicaron que la falta de una base de liquidación que entre otras formas se podría sacar por capacidad del barco a operar no existe, cuando podría ser una salida de esta situación.
FUENTE: Prensa CAPATACES PORTUARIOS
CRÉDITO FOTOS: SERGIO SANTILLÁN – CROSIND EDICIONES
