La Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (CTERA) que conduce Sonia Alesso expresó su repudio ante «un nuevo acto de autoritarismo del gobierno ultraderechista de Javier Milei», que en «una medida arbitraria y unilateral dio de baja» las plataformas “educ.ar” y “conectar igualdad” con el supuesto argumento de “revisar los contenidos”.
De esta forma, el gobierno de La Libertad «avanzó» sobre los derechos del pueblo «censurando los contenidos educativos que estaban alojados en las plataformas digitales públicas, puestas a disposición de toda la docencia, de las y los estudiantes y de sus familias».
Este lunes 29 de enero, la CTERA a través de un comunicado rubricado por su secretaria general Sonia Alesso y el secretario de Educación Miguel Duhalde, declaró que: Es totalmente inaceptable que quienes aún ni siquiera han nombrado autoridades para una Secretaría de Educación degradada en todos sus sentidos, ahora se arroguen la potestad de dar de baja o “suspender” un conjunto de materiales y recursos que fueron creados a lo largo de todo el período democrático caracterizado por la ampliación de derechos, la inclusión socioeducativa y la inclusión digital».
En este marco, la Confederación gremial de los docentes destacó que «tanto educ.ar como conectar igualdad son programas educativos que cuentan con sitios web en los que, educadores/as como estudiantes, han podido recurrir todo este tiempo (especialmente en contexto de pandemia) a los efectos de indagar, conocer, descubrir e incluso comparar distintos tipos de saberes y conocimientos que se presentan en forma de contenidos, recursos para el aula, estrategias didácticas, etc». Especificando que, «se trata de textos, videos, tutoriales diversos materiales que son utilizados para estudiar, preparar exámenes, diseñar clases Y lo más importante, estas plataformas estatales que se ofrecen de manera pública y gratuita, permiten dar una gran batalla en contra de los procesos globales de privatización de la educación y mercantilización del conocimiento».
Y advirtió que, «es muy llamativo que no habiendo aún ninguna definición de política educativa ni de planeamiento por parte del Estado Nacional, se tomen este tipo de medidas en las que hay evidentemente un gran prejuicio respecto a los procesos de construcción pedagógica que hemos sostenido en estos 40 años de democracia». Ante lo cual se preguntaron: ¿Quién o quiénes estan “revisando” estos contenidos?, ¿con qué propósito o sentido?, ¿con qué legitimidad? Y si lo que querían era “revisar”, ¿no lo podían haber hecho sin tomar la medida de suspender las plataformas en cuestión?».
Respondiéndose: «Evidentemente esta medida forma parte de todo el paquete del Gobierno que tiene como objetivo final la destrucción de la educación pública. Tuvieron el mismo proceder irrespetuoso de las instituciones democráticas con el DNU y la Ley ómnibus, declarando a la educación como un “servicio”, vulnerando nuestro derecho a la protesta social, definiendo medidas que solo están dirigidas a evaluar desde la perspectiva del control y el disciplinamiento; incorporando, además, a la educación a distancia desde los primeros años de la escuela primaria».
Agregando que, «frente a la gran resistencia, luego “retocaron” algunos artículos, pero para empeorar la situación. Con respecto a la educación a distancia corrieron unos años, pero dejaron abierta la posibilidad de la educación híbrida con el impulso de la educación desde los hogares (homeschooling). Esto está directamente relacionado con la suspensión de las plataformas educativas estatales, porque lo que tienen en mente es promover la injerencia de las plataformas de las grandes corporaciones del sector privado que existen a escala mundial-global y que hacen de la educación un negocio más y un instrumento para la imposición de los valores del mercado. Construidas desde las lógicas del sector privados, estas plataformas producen “enlatados” y ponen a disposición del “público-consumidor” una serie de recursos propios de lo que en la actualidad se ha dado en llamar el capitalismo de plataformas».
La CTERA auguro que seguramente desde el Gobierno de Milei, «saldrán a decir que quieren combatir el supuesto adoctrinamiento que tienen los contenidos de las plataformas estatales, especialmente en lo referido a las «ideologías» de géneros, la ESI, los derechos humanos y/o la educación ambiental… Pero lo que están haciendo ahora es un verdadero adoctrinamiento que se sustenta en los valores de un liberalismo descarnado que no duda en aplicar al pueblo un ajuste salvaje en nombre de “las fuerzas del cielo” y de las “leyes del mercado”.
«Desde CTERA repudiamos este apagón educativo que realiza el Gobierno de Javier Milei, porque queda a las claras que se trata de un paso más que están dando hacia el adoctrinamiento de mercado y la destrucción del derecho a la educación pública», concluyó.