La Federación y Empleados de la Industria del Papel, Cartón y Químicos (FOEIPCYQ), que lidera JOSÉ RAMÓN LUQUE, junto a los Sindicatos de base adheridos, participaron de la jornada del 24 de enero de PARO y MOVILIZACIÓN al CONGRESO de la NACIÓN en rechazo al MEGA DNU y la LEY ÓMNIBUS que pretende imponer el gobierno nacional de Javier Milei.
El Consejo Ejecutivo Nacional de la FOEIPCYQ convocó oportunamente a “paralizar todos los establecimientos fabriles y llenar la Plaza”. Con el punto de encuentro en la Av. 9 de Julio e Independencia, los papeleros marcharon al Congreso “a decirles a los diputados que el pueblo trabajador está en la calle una vez más luchando por sus intereses y por la Patria” y por eso le dicen NO al DNU y a la LEY ÓMNIBUS del Gobierno de MILEI.
“¿Por qué el movimiento obrero argentino tiene que esperar al Gobierno? ¿Darle tiempo para qué, para que nos vacíe de todo derecho?”, planteó la Federación del Papel al adherir a la medida de fuerza. En ese sentido manifestó que la lucha es “para conservar nuestros derechos, porque de producirse la eliminación de la ultraactividad de los Convenios Colectivos de Trabajo perdemos todo, como así también el derecho a huelga, el de protesta en la puerta de las fábricas” y también la organización sindical de los trabajadores, “único frontón contra el abuso patronal y de los gobiernos, como éste que pretende vender nuestra Argentina”, remarcaron.
A su vez recordaron que “el movimiento obrero no fue consultado para la elaboración del DNU 70/23, cuyo modelo nos vacía de derechos y rompe la estructura sindical argentina”. Y expusieron que el DNU propone cambios significativos en la legislación laboral, produciendo un retroceso al pre-peronismo, con el objetivo de flexibilizar las relaciones laborales y fomentar la libre competencia, lo que algunos ven como una oportunidad para modernizar el mercado laboral, mientras que nosotros lo percibimos como una amenaza para los derechos de los trabajadores”.
A través de un documento en el que hacen un extenso paralelismo entre políticas de la última dictadura militar y el gobierno libertario, con relación a la flexibilización laboral, reducción de derechos, persecución gremial y proscripción sindical y política, y la prohibición de manifestarse, entre otras medidas que iban contra “los derechos fundamentales de los ciudadanos”, el Consejo Ejecutivo Nacional de la Federación Papelera insistió en que “no es posible que en el siglo XXI un gobierno disfrazado de democracia intente, a través de la represión y prohibición, ejecutar un plan económico a la usanza de los gobiernos dictatoriales, que no dejan de ser trasnochados con ideas que creíamos disueltas”, concluyeron.
CRÉDITO FOTOS: Sindicato Papelero de San Martin
