“Si bien anteriormente era secretario gremial, esta etapa al frente del gremio empezó hace siete años un 24 de mayo con las votaciones, donde la gente demostró que creía en mí. Asumí el 1 de junio de 2012, y desde ahí le empecé a dar para adelante, en un camino donde el sindicato del fósforo creció exponencialmente”, sentenció el secretario general del Sindicato de Obreros y Empleados de la Industria del Fósforo, Encendido, Pirotecnia, Velas y Afines, Clay Jara Toledo.
“Aquel sindicalista que piensa en las necesidades de sus trabajadores, que trabaja para su gente y lo hace con dedicación y transparencia logra los objetivos propuestos. Por eso en estos siete años crecimos exponencialmente, sin exagerar en un 1300 por ciento”, comentó Jara Toledo con relación a la evolución del sindicato que tiene alcance nacional.
En cuanto a la relación con los empresarios del sector en estos años, el dirigente explicó que “primero fue una lucha, pero después nos pudimos sentar a concientizar cómo trabajar y tener un modelo de trabajo”. Contó que “en primer plano, la preocupación siempre es sentarme a dialogar, y recién si no fluye ese diálogo se va a la pelea. Pero hasta ahora, nos hemos sentado y dialogado con la parte empresaria. Hemos llegado a buen puerto, hemos acordado siempre y tratado de concientizar sobre cómo va todo y encontrar soluciones sin agravios. Café de por medio conversamos y tomamos la determinación correspondiente que siempre es la mejor posible”.
Además, señaló que, dentro de los logros paritarios del movimiento obrero, el del Fósforo es “uno de los que mejores acuerdos salariales ha alcanzado, tal vez detrás de aceiteros”, y siempre “logramos salarios razonables para el bienestar de la gente”.
LA ACTIVIDAD
En cuanto al sector de actividad, Jara Toledo sostuvo que “las empresas más grandes tienen mejor propulsión”, es decir que “lo que refiere a pirotecnia y fósforo casi no tenemos inconvenientes”. Sin embargo, “donde sí tenemos problemas es en la fabricación de velas y sahumerios…” De hecho, desde el sindicato están “ayudando a algunas de las tantas empresas de este tipo porque hoy en día sus dueños sostienen que con la situación del país deberían cerrar”. Entonces, “para que no lo hagan, desde el sindicato y con el aporte de los mismos operarios de las demás fábricas, les damos una ayuda para que no cierren y que los trabajadores puedan mantener sus puestos de trabajo”.
En ese aspecto, Jara Toledo afirmó que “es una responsabilidad impostergable del secretario general ocuparse de quienes representamos”.
“Desde la crisis 2018, dado que más del 80% son pymes, hemos perdido un montón de trabajadores porque cerraron entre 50 y 60 fábricas. Por eso estamos tratando de resguardar a los que hoy tienen empleo. Todo depende de la posición del dueño de cada pyme, de hasta dónde puede mantener el equilibrio de la fábrica”, comentó y en ese aspecto detalló que las empresas en cuestión, entre otras cosas, fueron afectadas fuertemente por los tarifazos.
“Esa es la razón por la que estamos bancando un poco y tratando de organizarnos para que esas empresas sigan de pie. Hemos tratado de llevar trabajadores a otras fábricas, tratamos de complementar para que esa gente no quede en la calle, y ver de qué forma podemos mantener y contener a esa gente”, remarcó.