El Consejo Directivo Nacional de la Unión Trabajadores del Estado de la República Argentina (UTERA), que conduce RUBÉN GRIMALDI, declaró el Estado de Alerta y Movilización al momento de expresar su mayor preocupación y rechazo ante la denuncia maliciosa con la cual se intentó cerrar el POLICÍNICO PAMI I de la ciudad de Rosario, Santa Fe.
«Ante esta maniobra vil que pone en riesgo la atención de los adultos mayores y la fuente de trabajo de cientos de compañeros», en la firme convicción de que la salud de los jubilados y jubiladas «no puede ser avasallada por intereses oscuros», la UTERA manifestó con firmeza: «Los trabajadores del PAMI tenemos en claro que el Policlínico puede seguir funcionando y que sus problemas se solucionan con la inversión adecuada y la gestión del personal de carrera», concluyó el gremio.
La alarmante situación, según trascendió a través de los medios locales, se generó a partir de una denuncia anónima infundada por una supuesta pérdida de gas y en consecuencia se instaló la posibilidad de un cierre preventivo por la falta de suministro. Esto dio lugar a la reacción de las y los trabajadores del Policlínico PAMI I que manifestaron frente al edificio sito en la calle Sarmiento 455 de Rosario, para denunciar que se trato de una artimaña para hacerlo desaparecer. Los manifestantes afirmaron que no hay fuga alguna, que la calefacción funciona con aire acondicionado y que contaban con termotanques eléctricos que ya habían sido instalados.
Los manifestantes pusieron en evidencia que, “esta denuncia anónima de la semana pasada pretendía imponer que había pérdida de gas, cuando era una burda mentira». Es más, señalaron que LITORAL GAS, la empresa distribuidora de gas natural por redes en el área de la provincia de Santa Fe y el noreste de Buenos Aires, «informó públicamente que no había pérdida. O sea no quedan dudas que existió la intención provocar la evacuación del policlínico para dejar sin prestaciones a los jubilados y sin trabajo a más de 600 trabajadores”, finalizaron.
El PAMI o Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados (INSSJYP), es una de las áreas más sensibles del Gobierno Nacional por su función, la de cuidar la salud, el bienestar y la subsistencia de 5 millones de adultas y adultos mayores en la Argentina, por su caja es una de las más importantes del Estado, y por su alcance y lo que representa: Es la obra social más grande de Latinoamérica. Todas estas consideraciones propias de un Estado presente, hoy por hoy están en extremo peligro con la política del actual gobierno que con sus medidas apunta a la reducción del Estado a su mínima expresión.