“En un nuevo aniversario de su fallecimiento, queremos recordar a nuestro eterno líder, Miguel Quiroga, quien dio todo por los trabajadores del turf, su trabajo gremial permanente, su experiencia sindical, sus fuertes convicciones y ante todo su lealtad a la organización sindical, desde la que forjó las mayores conquistas en toda su historia de lucha. Pero ante todo, queremos recordarlo como aquel humilde trabajador y gran dirigente que nos enseñó el camino a seguir y que hoy, a pesar de su ausencia física, nos sigue guiando en la compleja tarea gremial que nos toca ante las difíciles circunstancias que estamos viviendo en el país, que afectan directamente a las familias trabajadoras”, señaló el conductor de la Asociación Gremial del Personal de Hipódromos de Buenos Aires y San Isidro, y Agencias Hípicas Nacionales y Provinciales (APHARA), Diego Quiroga, quien asimismo reconoció que “en este momento, no solo la lucha se enfoca en lograr mejoras salariales, sino en lograr el sostenimiento de las fuentes de trabajo, vitales para que los compañeros puedan sostener la economía de sus familias”.
El 6 de abril se cumple el tercer aniversario del fallecimiento de quien fuera secretario general de la APHARA, luego de haber acuñado una trayectoria de más de 40 años en la vida gremial.
“Como padre, me dio el mayor de los ejemplos, el de luchar por las convicciones y dejar todo en ese derrotero que emprendió por sus compañeros. Eso marcó a fuego mi destino, y en el presente de la APHARA me toca enfrentar nuevos desafíos, acompañado de un grupo de dirigentes y militantes comprometidos con una lucha gremial decidida, en la que es central la trayectoria histórica de nuestro gran conductor”, explicó el secretario general de la organización gremial.
«Recuerdo que mi viejo, en oportunidad de hacerle un reconocimiento y evocar a cada uno de los dirigentes que le transmitieron su forma de hacer gremialismo, dijo que de todos ellos, más sus propias experiencias, se fue puliendo como dirigente, aprendiendo, asimilando esa pasión incontenible , ese sentimiento de ser lo que fue con mucho orgullo, de ser sindicalista y peronista, de ser quien representó y defendió los derechos profesionales de los trabajadores de la actividad hípica, y ese sentimiento que tan bien supo expresar siempre lo tengo presente y hace a mí espíritu como dirigente, es el que me ayudó a forjarme en mi propio camino sindical. Por eso, hoy quiero reivindicar al gran dirigente que fue Miguel Quiroga y hacerle este reconocimiento a su humildad, a su entrega como tal, y a su estirpe, que gracias a él corre por mis venas”, expresó Diego Quiroga.
POR LA GENTE Y LA ORGANIZACIÓN
“Miguel Ángel Quiroga, gran dirigente del Turf y de la hípica nacional, fue para nosotros un enorme ser humano que por más de cuatro décadas nos brindó su vida como un compañero más. Lo hizo primero como trabajador, luego como delegado y finalmente como dirigente sindical hasta alcanzar el pináculo de la conducción de su querida Gremial, como él le decía”, recordó Diego Quiroga.
“En cada paso y en todas las circunstancias que le tocó enfrentar, Miguel bregó por el bienestar permanente de la gran familia del personal de hipódromos y agencias hípicas. En ese trayecto, con su palabra y sus acciones supo formar cuadros gremiales que se sumaron a la lucha porque tuvo la visión de dejar a su paso un gremio fuerte, capaz de liderar las más difíciles batallas de una lucha sin tregua en defensa de las fuentes y puestos de trabajo de la actividad. Así evitó que desaparecieran los Hipódromos de Palermo y San Isidro y logró la estabilidad laboral de los trabajadores a través de importantes conquistas, entre ellas el primer Convenio Colectivo de Trabajo con el Jockey Club en el ámbito de San Isidro”, consideró.
Alguna vez, Miguel señaló su visión como dirigente: “Lo nuestro es vocacional, tiene que ver con la solidaridad que vive adentro de cada uno de nosotros, de cada dirigente sindical a la hora de jugarse por sus compañeros. Tiene que ver con esa pasión que corre por nuestras venas, y en esa pasión radica la grandeza de nuestro gremio. Porque si bien es verdad que los hombres pasan y las instituciones quedan, es fundamental aquello que muy bien definió el General Perón, que las organizaciones sindicales no sólo valen por el número de afiliados, sino más bien por la calidad de los dirigentes que las conducen y las encuadran».
“Hoy desde este lugar donde nos toca continuar la lucha, queremos hacer honor a su vida ejemplar como ser humano y dirigente, y remarcar que aunque no esté físicamente con nosotros, Miguel Quiroga seguirá presente hoy y siempre en cada uno de nosotros, en cada una de nuestras luchas como de nuestras conquistas”, concluyó Diego Quiroga.