CONSIDERACIONES NECESARIAS PARA IMPULSAR NUEVOS ACUERDOS PARITARIOS EN 2022
Por el Abogado Leonardo Martínez Verdier (*)
La masa salarial que los empleadores acumulan al negar incrementos salariales en las paritarias, es utilizada para comprar dólares en el mercado de contado con liquidación. Estas operaciones financieras hacen subir la cotización del dólar y producen inflación. Porque la suba del dólar se traslada a los precios en pesos de todo lo que consume el pueblo argentino.
LA PÉRDIDA DEL PODER ADQUISITIVO DE LOS TRABAJADORES CON TRABAJO REGISTRADO
Desde que en 2016 comenzó el gobierno de Macri, el poder adquisitivo de los trabajadores cayó sistemáticamente, sin perjuicio del incremento de la desocupación.
Cuando Macri asumió los trabajadores recibían el 51,8% de la riqueza que producían y sus empleadores el 40,2%. En 2020 comienza el nuevo gobierno del Frente de Todos. Tres meses después se desató la pandemia de Covid 19 que produjo alteraciones en la producción de riqueza y desconcierto. En 2021 se puede cuantificar. Pues los asalariados recibieron el 43,1% y sus empleadores el 47%.
Estos porcentajes significan que entre 2016 y 2021 los trabajadores con la constante y persistente disminución de sus salarios perdieron o no recibieron en concepto de remuneraciones 7,7 billones de pesos, es decir, $7.700.000.000.000.- (siete mil setecientos millones de millones de pesos).
Esa cifra es equivalente a 26 mil millones de dólares a cotización Contado con liquidación.
El dólar contado con liquidación (CCL) es el que resulta de una operación bursátil que implica comprar una acción o un bono en pesos y vender ese mismo papel en dólares.
Entre 2020 y 2021, mientras se desarrollaba la pandemia el excedente empresario subió de 15,3 billones de pesos a 18,3 billones. Los 3 billones de diferencia suponen 10 mil millones de dólares CCL.
A la injusticia social que muestran estas cifras, hay que agregar que buena parte de ese excedente capturado vía caída salarial tuvo como destino la compra de dólares financieros.
Esta maniobra financiera realizada con el dinero que le sustrajeron a sus trabajadores, perjudica a esos trabajadores por partida doble. Porque esas compras de dólares por cifras tan elevadas, producen la suba de la cotización de la divisa, que se traslada a los precios que deberán pagar los trabajadores con sus magros salarios. Por este motivo no llegan a fin de mes y deben concurrir con sus familias a los comedores comunitarios.
El mercado de Contado con Liquidación (CCL), mueve aproximadamente 70 millones de dólares diarios; unos 18 mil millones anuales. En 2022 la pérdida de los trabajadores en manos de los empleadores se acentuó y con ella el excedente corporativo.
La alta inflación generó una transferencia de ingresos de la base a la cúspide, es decir, los trabajadores empobrecidos por sus bajos salarios, les han transferido a sus ricos empleadores sumas millonarias, conformadas por una enorme masa salarial, que debería haber sido redistribuida entre todo el universo de trabajadores, para salir de la pobreza y vivir con dignidad.
Los salarios se retrasaron, por lo se produjo un aumento de la productividad. Pues bajó su valor respecto a los costos totales, y al mismo tiempo los empleadores incrementan sus ganancias en la misma proporción que han disminuido la masa salarial.
Gran parte de ese excedente va a la compra de dólares en el mercado de contado con liquidación (CCL).
De esta manera, la caída de los salarios, se convirtió en la principal impulsora de la suba del dólar. Porque ese excedente no pagado en salarios, los empleadores lo vienen utilizando para comprar dólares en la operación bursátil Contado con Liquidación (CCL).
Además de los beneficios por partida doble que están enriqueciendo a los empleadores, a costa de la miseria a la que arrastran a los trabajadores, hay una nueva, por la que podríamos decir que se enriquecen más y más. Ahora por partida triple.
Recientemente y ante la falta de dólares en la reservas nacionales, que son indispensables para la vida del pueblo. Por. Ej. compra de combustible o de vacunas, se han dictado medidas que imponen restricciones a ciertas importaciones.
La reacción de muchos empresarios, en clara muestra de su falta de empatía con el pueblo argentino, y con el argumento de que no conocen el precio de reposición de los productos que habían importado, comenzaron a referenciar sus precios en pesos para la venta en nuestro país, en el precio del dólar Contado con Liquidación (CCL), que ellos mismos habían hecho subir al comprarlos con el dinero que sustrajeron de salarios de sus trabajadores.
La situación que se ha expuesto pone de manifiesto que, no sólo es mentira que la suba de salarios impulsa la inflación, como vienen sosteniendo en las reuniones de negociaciones paritarias los empleadores y la representación del Ministerio de Trabajo, sino que es todo lo contrario.
Pues un importante incremento salarial en todas las actividades productivas y de servicios, desactivaría la compra de dólares, al ser redistribuídas las importantes ganancias empresarias con los trabajadores que han creado esa riqueza con su trabajo.
Porque si se recortaran las ganancias de los empleadores, para que ya no pudieran tener el excedente producto de los bajos salarios que pagan, y entonces ya no dispusieran de ese dinero para comprar dólares e impulsar su aumento que a su vez produce el aumento de los precios, ese recorte de ganancias haría disminuir la inflación e incrementar los salarios.
Por estos motivos, resulta indispensable subir los salarios para bajar la inflación, es decir, todo lo contrario de lo que pregonan en imponen los empleadores y los representantes del Ministerio de Trabajo en las negociaciones paritarias.
Esto además impulsaría la actividad. Pues el dinero que gastan en dólares deberían utilizarlo para pagar mejores salarios que al ser gastados por los trabajadores, reactivarían el mercado interno argentino.
SUMA FIJA EN PARITARIAS PARA SUBIR LA BASE DE CÁLCULO
Un informe del Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (CELAG), que es una institución dedicada a la investigación, estudio y análisis de los fenómenos políticos, económicos y sociales de los países de América Latina y el Caribe. Fundado en el año 2014, señala que “la ganancia empresarial se ha incrementado con la inflación a costa del bienestar social de los trabajadores: de forma acumulada entre 2016-2021.
Así lo demuestran los siguientes números:
La masa salarial en la economía creció 335 por ciento, mientras que los precios crecieron 474 por ciento y los beneficios empresariales 523 por ciento. Entre 2020 y 2021 la masa salarial creció 42 por ciento, los precios 52 por ciento y la ganancia empresarial 75 por ciento.
(*) Dr. Leonardo Martínez Verdier
Abogado Laboralista
Egresado de la Escuela Superior de Comercio “Carlos Pellegrini”, y de las Facultades de Derecho y Ciencias Sociales de la Universidad de Buenos Aires. Representó y defendió intereses políticos e institucionales tanto en el sector privado como en el Estado Nacional. Fue Coordinador de Relaciones Laborales en la Dirección Nacional de Ocupación y Salarios del Sector Público del Ministerio de Economía de la Nación y Asesor en la Honorable Cámara de Diputados de la Nación. Fue asesor jurídico y económico de la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (UATRE), en la Comisión Nacional de Trabajo Agrario y se desempeña como miembro asesor en la Comisión Legislativa Rural.