Autoridades de la CGT se reunieron el 8 de octubre en la sede de la UOCRA con integrantes de la misión del Fondo Monetario Internacional, a quienes le plantearon la necesidad de que el organismo se comprometa a realizar con el gobierno argentino una negociación “realista y flexible” con respecto a las posibilidades reales que hoy tiene nuestro país para afrontar los compromisos de pago. Y le demandó al organismo multilateral «la búsqueda de una solución para garantizar sustentabilidad macroeconómica y el desarrollo inclusivo».
En ese orden, la central obrera les anticipó su rechazo a cualquier “implementación de reformas estructurales que impliquen reforma laboral, rebaja de jubilaciones y reducción de empleados públicos” que pueda pretender del FMI del gobierno nacional.
La dirigencia sindical expresó en la reunión un contundente apoyo al gobierno nacional en el trazado de sus líneas de negociación que posibilitaron la reestructuración con los tenedores de deuda privados y respalda del mismo modo al gobierno en una estrategia de negociación con el FMI que priorice la posibilidad de recuperación económica del país.
Con el FMI “hay que seguir los mismos lineamientos que en la conversación con los bonistas privados. Cualquier acuerdo que se haga con el Fondo no puede pasar por mayores sacrificios del pueblo argentino, existe la imposibilidad del país de hacer frente al terrible endeudamiento que heredó este gobierno”, afirmó el cotitular de la CGT Héctor Daer, quien estuvo acompañado en la reunión por el anfitrión Gerardo Martínez, Andrés Rodríguez (UPCN) y Antonio Calo (UOM), y también de Esteban Castro, en representación de los trabajadores de la economía popular.
“La deuda no puede pagarse a expensas del sacrificio y la pobreza de los trabajadores, que ya están atravesando una situación lo suficientemente crítica como para que se le pidan más esfuerzos”, sostuvieron.
Los referentes de la CGT le presentaron los números de la crisis económica. La intención fue exponer el “crudo panorama de la realidad social que padece nuestro país”, con altos índices de desempleo, pobreza e indigencia que, agudizados por la pandemia COVID19, configuran un escenario que requiere de una atención y asistencia inmediatas por parte del gobierno nacional hacia los sectores más vulnerables de nuestra sociedad”, explicaron.
A la comitiva del Fondo Monetario integrada por la directora adjunta del Departamento del Hemisferio Occidental, Julie Kozack, el jefe de la misión para la Argentina, Luis Cubeddu, y el representante del organismo en el país, Trevor Alleyne, la CGT le planteó sin tapujos que la actual situación de endeudamiento «desproporcionado e insustentable, consecuencia de la gestión encabezada por el ex presidente Mauricio Macri, no es ajena a esa institución» crediticia, y que en ese sentido “demandamos a las autoridades del FMI la necesidad de comprometerse a una negociación realista y flexible respecto de las posibilidades que tiene nuestro país para afrontar sus compromisos de pago, comprometiéndose en la búsqueda de una solución que garantice la sustentabilidad macroeconómica que permita un desarrollo inclusivo desde el punto de vista social y laboral”.
Además, la CGT comprometió su participación en un proceso de diálogo tripartito institucionalizado con el gobierno y los empresarios para diseñar un modelo de desarrollo productivo que garantice trabajo de calidad para todos los argentinos.
Posterior al encuentro con la delegación fondista, Héctor Daer opinó que el organismo “hoy entiende que es impagable la deuda en los términos que están planteados”, y que “hay una necesidad de resolverlo, cambiar esas condiciones”. E hizo hincapié en el planteo sindical de que “nuestro país no tiene margen ni para reformas que tengan que ver con la caída de derechos sociales y laborales, ni para más ajuste”.