«Este 1º de junio nos encuentra unidos, sabiendo que estamos viviendo uno de los momentos más críticos de nuestro país. Somos esenciales y le hacemos honor a semejante tarea», sostuvo en el Día del Aduanero el Sindicato Único del Personal de Aduanas que conduce Carlos Sueiro.
Los aduaneros remarcaron en la celebración que su tarea «no es esencial solo en tiempos de pandemia, es esencial siempre», deseando a sus pares un ¡feliz día!
El SUPARA celebró así el Día del Aduanero -fecha que conmemora el primer despacho de importación arribado en 1586 al puerto de Buenos Aires-, haciéndole llegar a las trabajadoras y los trabajadores de la actividad un cálido mensaje a través de un video institucional conmemorativo.
La producción alegórica realizada por la Secretaría de Prensa del SUPARA, trazando un paralelo con el baile del tango, destacó cómo «en este mundo problemático y febril, como dice Dicépolo, algo irrumpió en nuestras vidas y nos tocó bailar con lo más difícil. Y aunque el temor a veces paraliza, a nosotros nos pone en movimiento».
Es así que «un día nos dijeron que éramos esenciales, que no podíamos dejar de trabajar, y nosotros, que sabemos hacerlo y no entendemos de días, horarios, ni lugar, estábamos listos», dado que «el trabajo muchas veces nos encuentra amaneciendo o en plena noche, con frío, con calor, simplemente estamos haciendo lo que siempre hicimos y haremos», relata la voz en off del locutor.
El video continúa diciendo: «Todos los días abrazamos nuestra tarea con compromiso, con responsabilidad, para que los argentinos que hoy deben quedarse en sus casas sepan que, aunque aislados, estamos más cerca que nunca custodiando nuestra soberanía económica, permaneciendo en la primera línea de frontera».
Asimismo, haciendo hincapié en su «sentido de unidad», el SUPARA destacó que eso es lo que «nos hace fuertes, solidarios, y nos permite transitar estos momentos tan difíciles y complejos, con la convicción de saber qué nos demanda estos tiempos».
El Sindicato Aduanero sostuvo que «amamos lo que hacemos» y que «los trabajadores somos el corazón de la Aduana», por eso es que «la Aduana se construye con la fortaleza de sus trabajadores, con la historia viva de los que la hicieron grande. Con aquellos que recibimos su legado y, sobre todo, a través de la dignidad de todos los hombres y mujeres que seguimos sosteniendo nuestro deber en todos los rincones de nuestro país», remarcó la organización.